Loca Academia de Arqueología Mexicana 4. Los Olmecas en Xochitepec.
No es exageración afirmar que, siendo tanta la gente que vivió en el México antiguo durante tanto tiempo, cualquier lugar en donde uno excave es candidato a ser un sitio arqueológico. Durante los años que van de 2011 a 2013 se realizó la construcción de la casa de mis padres muy cerca del centro del municipio de Xochitepec, Morelos. Dado que en la entrada a la casa hay un bonito arbol "Jocote" o Ciruelo criollo (Spondias purpurea), la casa de mis padres adoptó el nombre de "El ciruelo".
Durante las obras de construcción en "El ciruelo", creo que haciendo las excavaciones para una cisterna o la alberca, un par de piezas arqueológicas fueron recuperadas en el terreno.
Venus de Xochitepec, vista frontal (izquierda) y vista posterior (derecha) con sus nalguitas medio de fuera.
Torso femenino
Cabeza humana con "ojos rasgados y boca ancha"
Piezas arqueológicas rescatadas.
Intentando saber el origen de las piezas encontradas, lo más natural para mí fue pensar que se trataba de piezas realizadas por alguna población periférica de la zona arqueológica más grande que estuviera cerca de la casa donde se hicieron los hallazgos. La zona arqueológica más importante de la que yo tenía conocimiento era Xochicalco. Esa zona tuvo gran importancia alrededor de los años 700 a 900 d.C. Fue una importante zona comercial, de observación astronómica y de cálculo calendárico. Fue tal la importancia de Xochicalco en su tiempo que se piensa que su auge está relacionado con la caída o decadencia de Teotihuacan.
Pirámide de las serpientes emplumadas. Xochicalco.
Vista panorámica de Xochicalco. Al fondo puede verse la laguna El Rodeo.
Xochicalco, Morelos.
Cuando pude ver las piezas recuperadas en el jardín, me llamaron la atención las características de la cabeza humana. En particular, se me hizo peculiar la presencia de los ojos rasgados y la boca ancha. Yo había visto en el Museo de Antropología piezas de arte antiguo cuyos rasgos me recordaban a los de la cabecita. Sin embargo, algo no me cuadraba, ya que las figuras de las que yo me acordaba que tenían esas características eran de origen Olmeca.
Recordemos que los Olmecas son conocidos como la "Cultura Madre" y por lo tanto es una cultura mucho más antigua que las demás. Los vestigios Olmecas más antiguos que se conocen datan del 1200 a.C. mientras los más recientes son de alrededor del 400 a.C.
Dada la antigüedad de la Cultura Madre, mi hipótesis de que las piezas encontradas eran olmecas me parecía poco plausible. Al mismo tiempo, yo sabía que los Olmecas se habían asentado principalmente en la costa del Golfo de México, en los estados actuales de Veracruz y Tabasco. Por otro lado, una cultura grande y mucho más cercana en el espacio y el tiempo era mejor candidata. Durante mucho tiempo, olvidé mi asociación Olmeca y me conformé con el origen Xochicalca de las piezas encontradas en el jardín.
Hace algunos meses tuve el privilegio de dar clases de historia y geografía en una secundaria localizada a un par de cuadras del centro de Xochitepec. Muchos de mis alumnos y sus familias habían vivido en el pueblo durante mucho tiempo, por lo que estaban bien enterados de cosas que a uno como habitante reciente y fugaz pasan desapercibidas. Uno de mis alumnos me comentó que al construir su casa habían encontrado piezas arqueológicas y que su familia creía que estaban relacionadas no con Xochicalco, sino con otra zona arqueológica oculta en Xochitepec y que ya algunos arqueólogos habían explorado.
Resultó que mi alumno tenía razón. En el año 2006, arqueólogos del INAH realizaron trabajos de salvamento en la zona conocida como Zazacatla. Hoy en día el lugar se ha vuelto a abandonar por lo que, a pesar de haber pasado muchísimas veces frente a la zona, nunca la reconocí como arqueológica. La cercanía con el lugar donde se encuentra la casa de mis padres no deja duda de que las piezas encontradas en el jardín estaban relacionadas más bien a la zona de Zazacatla.
Imagen satelital donde se ven las distancias entre las zonas arqueológicas de Xochicalco, Zazacatla y el lugar donde encontramos las piezas marcado como "El ciruelo".
Foto de satélite del centro de Xochitepec, Morelos. Se marca la línea de 1 Km que conecta Zazacatla con "El Ciruelo".
Vista satelital de la zona de Zazacatla. Hoy en día la vegetación ha recubierto las excavaciones realizadas en el 2006. Sin embargo, las puntas de las flechas azules marcan la zanja, aun visible, excavada por los arqueólogos.
Lo que más me sorprendió fue que los habitantes de Zazacatla ¡eran casi olmecas! Es decir, pertenecian a la tradición social, religiosa, arquitectónica y artística derivada de los olmecas y pertenecen a lo que los arequeólogos llaman el "fenómeno olmeca". La zona fue una de las más importantes en Morelos de los años 1000 a 800 a.C. y el auge arquitectónico se alcanzó en el periodo llamado Posclásico medio (700-500 a.C.).
Fotografías tomadas de la zona de Zazacatla durante las excavaciones en 2006.
Para un aficionado al conocimiento arqueológico como yo, fue una hermosa sorpresa enterarme de que las piezas que mi jardín había guardado enterradas y que hoy tengo junto a mí, tenían cerca de 2500 años. Me pregunto qué pensarían los pobladores de Zazacatla si vinieran hoy a ver qué hemos hecho del mundo que ellos habitaron.
Vasija encontrada en El Ciruelo
P.S.
Si quieres leer más sobre Zazacatla, puedes dar clic a estos enlaces:
Más historias de arqueología mexicana en este Blog puedes leerlas aquí: Más arqueología.
Comentarios
Publicar un comentario